En tiempos de incertidumbre, e incluso cuando las cosas parecen fluir con normalidad es de suma importancia que los equipos de trabajo “se pongan la camiseta”.

“Lo cierto es que para que las personas den lo mejor de sí y se comprometan con los objetivos de una empresa es primordial que gocen de bienestar laboral que les permita, sin dudarlo, ofrecer todo para llevar a su empresa hacia un mejor puerto”, de acuerdo con un comunicado de Crehana.

Juliana López De Romaña, experta internacional en Gestión de Talento y profesora en  Crehana, ofrece algunas recomendaciones para mantener motivado y comprometido a un equipo de trabajo:

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El factor salarial no es decisivo: El salario ya no es un factor que defina la permanencia de una persona en la empresa en la que trabaja. Por ejemplo, el ambiente laboral puede ser determinante a la hora de decidir permanecer o decir adiós a un trabajo. Otros beneficios, como la flexibilidad en los horarios o el crecimiento profesional, son muy valorados y se convierten poco a poco en una condición imprescindible para decidirse a continuar su crecimiento en la misma organización. Es importante que las compañías le den mayor valor a trabajar con base a objetivos y no a horarios, así como promover la colaboración y ofrecer una cultura dinámica.

Programas de bienestar laboral: Estos deberán enfocarse en tres aspectos: salud física, financiera y emocional. Tener buena salud y energía resultará en mayor productividad. Asimismo, el aspecto financiero les permite concentrarse en sus metas laborales y no enfocar sus pensamientos a preocupaciones económicas. Por último, la salud emocional define en gran parte el desempeño durante la labor diaria de los equipos. Organizar pláticas con expertos en estas áreas puede brindar balance y generar un impacto positivo en los resultados. Las empresas pueden también dar reconocimientos o gratificaciones que motiven a sus equipos de trabajo.

Ofrecer beneficios a la medida: Las personas tienen necesidades diferentes, por ello es importante saber qué necesitan los equipos de trabajo y quienes los conforman. Así se podrá también saber qué se quiere lograr y posteriormente implementar un plan de bienestar laboral. Es importante considerar que dicho plan no puede ir aislado de los de la empresa, sino que debe estar integrado a una estrategia general y ser conocido por los empleados. No sirve de nada si las personas no saben a qué tienen acceso a beneficios como capacitación constante que ayuden al desarrollo de su carrera dentro de la misma empresa.

Una persona motivada aporta mucho en su trabajo: Hay muchos factores que mejoran cuando una persona se encuentra motivada, por ejemplo, se puede disminuir el ausentismo, porque una persona entusiasmada con su trabajo se compromete con éste. La salud mental ha entrado a un nuevo punto en el que deja de ser invisible. Cuando hay menos ansiedad, menos depresión y poco estrés, se logrará un incremento en la productividad. Una persona desmotivada usa el día para diferentes actividades no relacionadas con los objetivos del trabajo. En conjunto, se genera un sentimiento de pertenencia que resulta en mayor compromiso con la empresa

Fomentar el compromiso laboral: Existen pequeñas acciones que pueden generar una diferencia enorme en cuanto al compromiso con la empresa. Es importante que siempre se le apueste a una comunicación constante y transparente, ya que los trabajadores se sienten parte cuando se les habla de forma clara. Además, es importante delegar funciones estratégicamente, ya que con ello habrá mayor compromiso hacia la empresa y más conocimiento del rol dentro de ella. El compromiso también se puede fomentar por medio de propiciar el tiempo libre, lo que fomentará que los equipos de trabajo estén más enfocados en sus labores diarias.

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