Las búsquedas en internet relacionadas con las palabras “ansiedad” y “pánico” alcanzaron un récord histórico en Estados Unidos durante el inicio de la pandemia, de acuerdo con un estudio de la Universidad de California.

El análisis, realizado por diferentes especialistas de dicha institución especializados en el seguimiento de necesidades de salud pública , se llevó a cabo debido a la preocupación generalizada de que el Covid-19 pudiera dañar la salud mental de la población debido a la ansiedad que provoca esta enfermedad y la afectación que tiene en las relaciones sociales.

La investigación se llevó a cabo mediante el análisis de las búsquedas en Google, que mostró que las consultas sobre la ansiedad y ataques de pánico fueron las más altas en más de 16 años de datos de búsqueda históricos, explica el estudio.

Para llegar a estos resultados los investigadores monitorearon la frecuencia con la que los usuarios buscaban frases como “ataque de pánico”, “ataque de ansiedad”, “¿estoy teniendo un ataque de pánico?”, “signos de ataque de ansiedad” y “síntomas de ataque de ansiedad”.

Los científicos compararon el número total de búsquedas relacionadas con la ansiedad durante los primeros días de la pandemia con datos históricos desde enero de 2004, y los ajustaron de acuerdo a variables como crecimiento de población y uso de internet durante los últimos 20 años.

Bajo estos parámetros, la investigación arrojó que la crisis por el Covid-19 provocó un aumento de 11% en las búsquedas relacionadas con ataques de pánico durante los primeros dos meses de la pandemia.

“En términos prácticos, durante los primeros 58 días de la pandemia de Covid-19 hubo un total estimado de 3.4 millones de búsquedas relacionadas con la ansiedad aguda severa en Estados Unidos”, dijo Benjamin Althouse, profesor asistente afiliado a la Universidad de Washington y colaborador del análisis.

El día con el pico más alto de búsquedas fue el 28 de marzo, un día antes que se extendieran las reglas de distanciamiento social, pues las consultas sobre la ansiedad fueron 52% más altas de lo esperado si no hubiera una pandemia.

“Un ataque de pánico no debe tomarse a la ligera, ya que puede llevar a alguien a urgencias con dificultad para respirar, palpitaciones, dolor en el pecho y una intensa sensación de miedo. Por ello, nuestros resultados sin duda justifican la necesidad de incrementar los servicios de salud mental”.

El valor de las consultas de seguimiento va más allá de la ansiedad aguda, agregó el doctor Mark Dredze, profesor asociado de ciencias de la computación John C. Malone en la Universidad Johns Hopkins y coautor del estudio.

“Por ejemplo, durante la pandemia de Covid-19, detectamos por primera vez picos en la compra de terapias no probadas y en la compra de armas utilizando métodos similares, y estos pueden extenderse aún más a temas de salud pública y mental”.

El estudio también concluyó que podría tomar varios años entender las consecuencias sociales del Covid-19, por lo que es posible que con el tiempo se identifiquen nuevas necesidades en cuanto a servicios integrales para responder a otros impactos colarerales relacionados con la salud mental y la pandemia.

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