Algunas personas que padecen depresión pueden vivir hasta 15 años sin saber que tienen este trastorno

La depresión es un trastorno que se ha ido incrementando con el paso del tiempo, sin embargo hay quienes continúan minimizando los síntomas y daños que puede causar en el ser humano.

Las cifras en de las personas que padecen depresión en México son elevadas, pues 15 de cada 100 habitantes sufren de esta enfermedad. Incluso la cifra podría ser mayor ya que muchas personas que la tienen, no son diagnosticadas nunca, de hecho hay quienes viven hasta 15 años sin saber que presentan.

Alfonso Andrés Fernández Medina, Director de Medios en Dirección General de Divulgación de la Ciencia de la UNAM, puntualizó que la depresión se manifiesta por un estado anímico de nostalgia profunda.

Durante el ciclo de actividades “Enfrentar la depresión”, realizada en Universum, Museo de las Ciencias, se señaló que de acuerdo con un estudio realizado por la Facultad de Psicología, casi seis millones de niños y adolescentes entre 12 y 22 años de edad sufren depresión en México. Y los principales síntomas que presentan son con irritabilidad y violencia. Otra población vulnerable son los adultos de más de 65 años, que debido a la falta de empleo, cambio de vida o pérdida de la pareja tienen una sensación de incertidumbre y tristeza.

Cabe destacar que este tipo de enfermedades mentales no respeta condición social ni edad, además existen diferentes factores con los que convivimos en el día a día que la detonan, por ejemplo el estrés laboral, pérdidas de seres queridos, desempleo, cambios drásticos de la cotidianidad, etcétera. Fernández Medina aseveró que “Es preocupante que entre los jóvenes la primera causa de mortalidad sea el suicidio, pues la depresión severa no es atendida con fármacos ni con psicoterapia adecuada”.

Por otra parte, en un estudio realizado por la Organización Mundial de la Salud, se calcula que los costos por tratamientos antidepresivos en 36 países de ingresos bajos, medios y altos en los 15 años que van de 2016 a 2030 se elevan a 147 000 millones de dólares. Sin embargo, los beneficios superan ampliamente los costos, pues se calcula que la mejora de la participación y la productividad laboral en un 5% supone un beneficio de 399 000 millones y en cuanto a la mejora de la salud otros 310 000 millones.

A pesar de estas cifras, las inversiones actuales en servicios de salud mental son muy bajas en relación con lo que se necesita. De acuerdo con la encuesta para el Atlas de Salud Mental de la OMS los gobiernos gastan por término medio un 3% de sus presupuestos sanitarios en salud mental, cifra que marca menos de un 1% en los países de ingresos bajos y 5% en los de ingresos altos.

En México entre 2020 y 2021, el Gobierno Federal redujo 81.6% de los recursos destinados a los estados para atender la salud mental de la población. En el extremo, hay 12 entidades que este año no cuentan con recursos de la Federación para hacer frente a trastornos como depresión, ansiedad y esquizofrenia, entre otros. Dentro de los estados afectados en esta baja son: Aguascalientes, Baja California, Campeche, Coahuila, Colima, Chihuahua, Chiapas, Ciudad de México, Hidalgo, Sonora, Tabasco y Zacatecas.

En 2020 el gasto se redujo a 283 millones de pesos debido bajas de transferencias monetarias del ramo 33 y de los apoyos del recién creado Insabi. De un año a otro, los estados se quedaron sin casi 82 por ciento de los recursos con los que contaban para salud mental, así que se están esperando las cifras destinadas para 2022.

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