Después de haber anunciado 21 destinos nuevos en el AIFA, han salido a la luz desafíos en las operaciones que podrían afectar a los pasajeros.

El Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) ha anunciado recientemente los nuevos vuelos que se sumaran a sus operaciones, luego de haberse mantenido con sólo seis rutas, ahora serán 27 que ofrecerán 100 operaciones al día.

Las aerolíneas Aeroméxico, Viva Aerobus y Volaris iniciarán con nuevos destinos y un incremento de frecuencias en rutas que ya existían en el AIFA, situación que se firmó en común acuerdo con el gobierno federal, con el propósito de alivianar el tránsito aéreo proveniente del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM). Así que los vuelos que se abrirán a partir de este verano serán:

• Volaris: Acapulco, Guadalajara, Huatulco, La Paz, Mérida, Mexicali, Oaxaca, Puerto Vallarta, Puerto Escondido y Los Cabos.
• Aeroméxico: Acapulco, Cancún, Guadalajara, Monterrey, Oaxaca y Veracruz
• Viva Aerobus: Acapulco, Cancún, Oaxaca, Puerto Vallarta y La Habana.

No obstante, después de observar cómo se llevará a cabo el proceso de estas nuevas rutas, se vislumbran algunos desafíos en cuanto al sector operativo, mismos que podrían afectar directamente a los pasajeros.

Inconvenientes de las nuevas rutas del AIFA

De acuerdo con analistas del ámbito aéreo. El primer conflicto con el que se podrían encontrar los pasajeros es cuando se pierde un vuelo, ya que al ofrecer sólo frecuencias diarias de cada ruta, sería imposible tomar uno siguiente en el mismo día. A diferencias del AICM, donde el alto número de frecuencias en los destinos más demandados dan la posibilidad de tomar otro vuelo el mismo día en caso de perder el primero.

Con el incremento de vuelos en el AIFA habrá una competencia por los destinos más demandados de México, situación que haría que las aerolíneas bajen los precios para acaparar a mas pasajeros, aunque esta estrategia sólo sería sostenible en la medida en que prevalezcan subsidios en la operación de las empresas en rubros como el de los costos, en el que Volaris, por ejemplo, ha referido que son 40% menores que en el AICM.

Todas las nuevas rutas se enfocarán al interior del país, con excepción de Viva Aerobus, que próximamente se propone operar hacia La Habana, Cuba. Sin embargo, esta situación deja de lado al mercado estadounidense, primordialmente por los obstáculos de la degradación de la seguridad aérea a Categoría 2 realizada por la Administración Federal de Aviación (FAA, por su sigla en inglés), la cual impide sumar nuevos vuelos y frecuencias a EU.

Es entonces que las rutas quedan limitadas a sólo operar dentro del país, las cuales por la frecuencia y la lejanía del aeropuerto, podrían dejar una mala experiencia en los pasajeros, pues serían víctimas del retraso, ir contra el tiempo y asimismo la imposibilidad de viajar a las rutas más demandadas hacia Estados Unidos, justo como sucede con el Aeropuerto de Toluca, el cual tiene un enorme espacio carente de operaciones aéreas.

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