Este año El Buen Fin puede ser un acelerador más de las ventas en línea y tiene mucho potencial para ser un éxito, no obstante, se enfrenta a retos y cambios importantes, de acuerdo con EY, empresa de servicios profesionales de auditoría, impuestos, asesoría de negocios, transacciones, fusiones y adquisiciones.

Según el EY Consumer Index, el Covid-19 forzó a las empresas a entrar en una era de innovación acelerada. Para muchas personas el confinamiento fue la razón principal para comprar por primera vez en línea, mientras que para muchas otras representó simplemente seguridad y comodidad. Es por eso que los comercios con canales digitales de venta han mostrado mayor resiliencia ante la crisis, en donde 5 de cada 10 empresas están duplicando su crecimiento en internet y 2 de cada 10 han experimentado crecimientos mayores al 300% en el volumen de negocios de las ventas en línea.

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“Esta edición puede ser un parteaguas del evento ya que su adaptación a la nueva normalidad será determinante para las siguientes ediciones. Y, sin duda alguna, será un hito para la reactivación económica, la recuperación de empleos, el crecimiento del comercio electrónico y para rescatar la confianza y participación del consumidor en estos momentos difíciles”, dijo Gilberto Lozano, socio líder de Business Transformation, EY Latinoamérica Norte.

Este año, el Buen Fin tiene un doble reto: tener éxito tanto con los estándares de salud como con los económicos, para lograrlo se extendió la duración que ahora será del 9 al 20 de noviembre, de esta forma se evitarán aglomeraciones, habrá mayor tiempo para aprovechar los descuentos y se fomentará la reactivación económica.

“Además, se ha identificado que el 40% de los consumidores buscan regresar a la normalidad mientras que solo el 8% sigue con intención de cortar gastos. Por otro lado, el impacto negativo en el volumen de ventas de los comercios en México ha ido disminuyendo a lo largo de la pandemia y 3 de cada 10 empresas han experimentado crecimientos en sus ventas totales durante los últimos meses, según la Asociación Mexicana de Ventas Online (AMVO)”, dice un comunicado.

“El consumidor está listo para recuperar la confianza y comprar. Sin embargo, la accesibilidad de los precios está dentro de su nueva prioridad, lo que sitúa al Buen Fin como una opción sumamente atractiva debido a los distintos descuentos disponibles”, destacó Gilberto Lozano.

El estudio de EY muestra que la respuesta del consumidor para la décima edición del Buen Fin representará varios cambios y retos. Por un lado, el 35% considera aprovechar los descuentos disponibles, mientras que el 29% lo está analizando. Existe un gran interés de algunos consumidores por ver qué variedad de productos y promociones pueden encontrar durante el evento y otros han esperado para comprar algo en específico. Por otro lado, el 36% piensa no participar ya que muchos consideran que los descuentos no son lo suficientemente atractivos o reales.

“El impacto de la pandemia todavía se ve reflejado, la situación económica es un obstáculo para algunos, mientras que el miedo al contagio prevalece para otros. Y a pesar de que muchas personas están regresando al ritmo de vida previo al confinamiento, el 38% preferiría hacer sus compras únicamente de manera digital, el 29% de forma digital y física por igual, y solo el 7% únicamente en tiendas físicas”, dice un comunicado.

En cuanto a las categorías de preferencia, el top 5 incluye tendencias nuevas como los electrónicos como la más elegida, así como un incremento importante en el interés por viajes y transporte. Asimismo, la categoría de deportes ha tomado relevancia. Todo lo anterior puede describir a un consumidor más adaptado a la nueva normalidad, el cual probablemente necesite adquirir electrónicos para homeschool, home office o entretenimiento, pero a la vez tiene expectativas de viajar en el futuro.

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