El Juzgado Décimo de lo Civil de la Ciudad de México dictaminó que Google es responsable de daño moral contra el abogado Ulrich Richter Morales por mantener en funcionamiento un blog que publica información falsa en contra del jurista.

El litigio, que tuvo una duración de cinco años, sentó un precedente para los medios digitales en el que se establece que los jueces mexicanos pueden iniciar asuntos contra empresas extranjeras, como la multinacional Google, ante reclamaciones presentadas en territorio nacional.

En la sentencia se señala que el blog creado por Alejandro Gutiérrez Torres, quien también fue sentenciado, usó el nombre de Ulrich Richter, difunde contenido falso sobre el abogado e incluso suplantaba la identidad de este, al usar su nombre y retrato, aparentando ser el autor y con contenido que invitaba a personas a cometer delitos como el lavado de dinero.

Todo ello a pesar de que las políticas de Google incluyen límites en su contenido entre los cuales está justamente el de la suplantación de identidad.

El fallo

La juez Décimo Civil considera que Google adquiere responsabilidad porque, aunque no fue creador del blog en el que se difundía información falsa sobre Richter, hizo caso omiso en retirarlo de su plataforma a pesar de que el afectado hizo una solicitud por escrito desde 2015 y conforme a los lineamientos establecidos por la propia compañía.

“Tolerar y permitir la continuidad de la publicidad y divulgación ilícita a nivel mundial de los contenidos del blog ilícito en forma injustificada, resulta ilícita y no había justificación para mantenerla en la red”, señala la resolución.

La juez también negó que el contenido del blog estuviera protegido por el derecho a la libertad de expresión.

“Los contenidos del blog ilícito rebasaron los parámetros constitucionales de estos derechos humanos, porque no son trabajos periodísticos propiamente, como tampoco información de interés público, pues fueron en contra de la moral y derecho de los actores”, resolvió.

La respuesta de Google

Ante ello, Google está obligado a publicar en su página oficial la sentencia definitiva dictada por la juez, aunque la compañía puede apelar el fallo, por lo cual hasta que se declara que ha causado ejecutoria deberá cumplir la resolución.

Como respuesta, Google argumentó que la información fue producida por un tercero a través de la plataforma Blogger y, por lo tanto, no tiene ninguna injerencia en la edición de los contenidos.

“Lamentamos el fallo del Juzgado Décimo de lo Civil de la Ciudad de México, el cual impone responsabilidad a Google, como intermediario, por contenido de un tercero que usa la plataforma de Blogger. Google no genera ni edita el contenido de Blogger. La sentencia determina daños desproporcionados e infundados”, dijo la compañía a través de un comunicado.

“Esto es una clara amenaza a la libertad de expresión por ser una forma de censura indirecta, expresamente prohibida por la legislación mexicana y por el Pacto de San José Costa Rica, ratificado por México.

“Siendo que Google promueve la libertad de expresión en internet, impugnaremos y nos defenderemos firmemente de todas las afirmaciones infundadas e injustas en los tribunales”, finalizó.