El arribo de turistas internacionales cayó 65% durante el primer semestre de 2020 respecto al mismo periodo del año anterior a consecuencia del cierre de fronteras y las restricciones de viaje impuestas por la pandemia de Covid-19, dijo la Organización Mundial del Turismo (OMT).

Este desplome significó una pérdida de 460,000 millones de dólares (mdd) en ingresos y 400 millones de llegadas internacionales, de acuerdo con el organismo y es cinco veces mayor a la registrada por la crisis económica de 2009, informó la OMT.

“Se trata de un desplome sin precedentes causado por el cierre de las fronteras en todo el mundo y la introducción de restricciones de viaje como respuesta a la pandemia”, apuntó el organismo dependiente de Naciones Unidas.

La Organización Mundial del Turismo también señaló que la menor demanda de viajes continuará en lo que resta de 2019.

Las regiones más afectadas fueron Asia y Pacífico, donde la actividad de turistas internacionales cayó 72% en el primer semestre.

La segunda más golpeada fue Europa, con un descenso de 66% del número de llegadas y América, con 55%

De acuerdo con las estimaciones de la OMT, la recuperación del sector iniciará en el próximo año; sin embargo, regresar a los niveles premios a la pandemia del Covid-19 tomará al menos entre dos y cuatro años.

El secretario general de la organización, Zurab Pololikashvili, dijo que la reactivación del turismo, lenta pero constante, será posible solamente con el liderazgo coordinado y una mayor cooperación entre los gobiernos.

Destacó que si bien en las últimas semanas diversos destinos han comenzado a recibir a turistas internacionales, solo el 53% han relajado las restricciones que mantenían para evitar la propagación de la enfermedad que se originó en la ciudad china de Wuhan.

A medida que comienzan a disminuir las restricciones a los viajes a escala global, los destinos de todo el mundo se están centrando en el creciente turismo interno, que contribuirá a la recuperación tanto en los países desarrollados como en los que están en vías de desarrollo, dijo la OMT.

Para Pololikashvili, la magnitud del turismo interno ayudará a muchos destinos a recuperarse de los efectos económicos de la pandemia, al tiempo que se salvaguardan los puestos de trabajo y se permite el retorno de los beneficios sociales que ofrece el turismo.

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