El costo del programa Pensión para el Bienestar de las Personas Adultas Mayores (PBAM) será difícil de cubrir en los próximos años, de acuerdo con el Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
“Se requerirá un presupuesto equivalente a 1.9% del PIB para que en 2024 puedan atenderse los 12 millones de adultos mayores de 65 años en el país. Esto implica que el gasto total en pensiones contributivas y no contributivas se ubicará en 6.5% del PIB, representando importantes retos en cuanto al financiamiento y a la distribución de recursos públicos, que en el contexto de la crisis de Covid-19 limita que se redirijan recursos al sector salud o educación”, dice un estudio del CIEP.
Para el CIEP, los problemas relacionados con el costo de la PBAM pueden atenuarse si existe una coordinación a nivel estatal sobre los apoyos a los adultos mayores y a nivel federal si se replantea el papel de las pensiones no contributivas en el sistema.
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“Adecuar el sistema de pensiones considerando el ingreso entregado mediante la PBAM puede generar mayores ingresos en la vejez, un mejor uso de recursos públicos y en general un mayor bienestar para los adultos mayores”, muestra la investigación.
#NuevaInvestigación | Analizamos la evolución de la pensión no contributiva en los últimos años y el impacto presupuestario de ampliar el monto de este programa social.https://t.co/RpIiSSfioc
— CIEP, A.C. (@ciepmx) April 20, 2021
Una pensión que ayuda, pero que no alcanza
En 2013 se creó el Programa Pensión para Adultos Mayores (PAM) como sucesor del Programa de Atención a los Adultos Mayores de 70 años y más en zonas rurales. La nueva versión del programa redujo la edad de acceso a 65 años y tenía la finalidad de cubrir a todos los adultos mayores que no tuvieran acceso a pensiones contributivas mayores de 1,092 pesos.
No obstante, el monto que entregaba esta pensión se mantuvo constante en 580 pesos mensuales de 2014 a 2018. Para 2019 aumentó a 1,275 pesos; sin embargo, desde su concepción no ha sido suficiente para cubrir las necesidades básicas de los adultos mayores.
“En 2019 nuevamente cambió de nombre a PBAM y con eso también modificó el requisito de edad, manteniéndose en 65 años para adultos mayores en comunidades indígenas y 68 años para los adultos mayores de comunidades no indígenas. Además, comenzó a incrementar el monto que se entregaba de la pensión y adquirió un carácter universal como una transferencia incondicional que aún en 2021 no alcanza a cubrir la canasta alimentaria urbana”, muestra la investigación de CIEP.
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