El pago de un bono de 143 dólares para atacar los efectos de la pandemia en Bolivia, generó filas en los bancos y expectativa al tratarse de la primera medida económica del presidente Luis Arce.
Algunas aglomeraciones se presentaron principalmente en las oficinas del banco estatal Unión, con “ancianos” que acompañados de familiares, de acuerdo con Mireya Morales, una oficial de policía encargada de la seguridad en una de las más importantes oficinas bancarias en La Paz.
El movimiento fue intenso para tratar de calmar los ánimos de muchas personas que intolerantes y aplicar las medidas de bioseguridad mínimas como el distanciamiento personal, que difícilmente se cumple en estas circunstancias, aseguró la oficial.
Las filas son extensas cuando llega alguien que quiere cobrar el “Bono Contra el Hambre” y esto coincide con la presencia de jubilados y los pagos de servicios ordinarios que habitualmente se hacen a principios de mes.
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“Estamos dando la preferencia y estamos dando de manera rápida y ya se están tranquilizando”, mencionó Morales, al destacar que cuando se identifica a un anciano se le entrega una ficha específica y se le asigna una fila especial.
“Ahora cualquier dinero que viene del cielo es bienvenido, hay mucha hambre, mucha desesperación, la gente necesita”, expresó Tito, un jubilado que reconoce la importancia de ese pago.
Pago del bono, primera medida del nuevo Gobierno
El pago del “Bono Contra el Hambre” es la primera medida del Gobierno de Arce para beneficiar a casi 4 millones de personas mayores de 18 años que no tengan ingresos, entre ellos ancianos sin jubilación, madres gestantes o discapacitados.
“Bono contra el hambre” provoca largas filas y expectativa en Bolivia. https://t.co/WqY4HqyeoO
— AlbertoRodNews (@AlbertoRodNews) December 2, 2020
Pero algunas organizaciones de padres de familia cuyos hijos están inscritos en la educación estatal gratuita exigieron que se les incluya para recibir ese beneficio social, por lo que se plantaron en la sede principal del Ministerio de Economía, en La Paz.
Mientras que en ciudades como Santa Cruz, la más poblada del país, se reportaron filas en las sedes bancarias con gente que incluso intentó cobrar el bono el día anterior.
Los fondos provienen de créditos del Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento del Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo, aprobados en la gestión legislativa anterior pero que el Gobierno interino se abstuvo en ejecutar.
Con información de EFE