La India registró este viernes 217,353, casos de coronavirus o covid-19, un nuevo récord diario después de superar el jueves la barrera de las 200,000 infecciones por primera vez desde el comienzo de la pandemia, mientras las restricciones suben y el personal de salud advierte sobre la presión en los hospitales.
Esta segunda ola en la India continúa en ascenso a un ritmo vertiginoso, sin que se vislumbre todavía su pico, con nuevos récords de infecciones casi a diario que sitúan ya el total de casos en el país en los 14.3 millones, con cerca del 10 % de ellos aún activos.
La India es el segundo país con más casos después de Estados Unidos, nación con 31 millones que contabilizó también 1,185 muertes en la última jornada, elevando el total hasta las 174,308, la cifra más alta de fallecidos tras EU que tiene 565,289; Brasil con 365,444 y México con 211.213.
De los 36 estados y territorios de la India, casi el 80 % de los casos se concentran en 10 de esas regiones, entre las que sigue como la más afectada Maharashtra, con más de 61,000 casos, seguida de Uttar Pradesh con 22,339 y Nueva Delhi con 16,699, de acuerdo con los datos del Ministerio de Salud del país.
En Maharashtra, cuya capital es Bombay, y Nueva Delhi, se han ido imponiendo algunas de las restricciones más severas para controlar la pandemia, como son los confinamientos totales durante el fin de semana, así como el cierre de gimnasios, centros comerciales o restaurantes.
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India en la segunda ola
Harsh Vardhan, ministro de Salud indio, se reunió este viernes con personal sanitario del principal hospital de Nueva Delhi, el AIIMS, en un encuentro en el que expusieron algunos de sus principales retos durante esta segunda ola.
“Creo que el mayor problema en este momento es la falta de personal”, aseguró el doctor Ashok Deorari, director del Departamento de Pediatría, en un encuentro que retransmitió en directo el Ministerio de Salud.
Deorari planteó ante el ministro la necesidad de que las autoridades impongan confinamientos periódicos de entre 10 y 12 días para romper la cadena de transmisión del virus, además de que los “líderes” se conviertan en un ejemplo para la sociedad y eviten todos los “eventos supercontagiadores”.
Sigue la vida cotidiana
Con elecciones durante el último mes en cinco regiones indias, en las que están llamadas 187.2 millones de personas a las urnas, las críticas hacia los mítines políticos son constantes, sin que las autoridades hagan algo para evitarlo.
Además se celebra el festival hindú de Kumbh Mela, la mayor y una de las más antiguas congregaciones religiosas del mundo, que comenzó oficialmente en abril en la Haridwar y se espera que, luego de presentar una prueba negativo de coronavirus, decenas de millones acudan a bañarse en las aguas del río Ganges.
🇮🇳 | URGENTE – CORONAVIRUS: NUEVOS MÁXIMOS HISTÓRICOS EN INDIA: 217,353 INFECCIONES EN LAS ÚLTIMAS 24 HORAS.
— Alerta News 24 (@AlertaNews24) April 16, 2021
“Mi miedo”, añadió el doctor Deorari, es que habrá una tercera y una cuarta ola, y es necesario acelerar la vacunación para alcanzar la “inmunidad de rebaño” lo antes posible.
Vacunas y pruebas
Esa campaña de vacunación en la India, bautizada como la mayor del mundo, comenzó en enero y hasta ahora se han administrado en 90 días 117.2 millones de vacunas, 2.7 millones en el último día, un número inferior a la media previa.
En total recibieron las dos dosis necesarias para la inmunización cerca de 15 millones de personas, un número todavía muy alejado de los 300 millones que las autoridades indias se propusieron vacunar en los primeros seis meses de 2021.
Mientras tanto, otra de las claves para contener la pandemia es la rápida identificación de los casos de coronavirus con pruebas masivas y el aislamiento de los positivos; hasta ahora se han hecho 263 millones de test en la India, 1.4 millones ayer.
Pero con los casos disparados se necesita aumentar este número, algo que no es posible en muchas ocasiones por encontrarse los centros de pruebas sobresaturados, como expuso este viernes uno de los sanitarios del AIIMS en la intervención con el ministro.
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“Hay colas para hacerse la prueba, con pacientes con síntomas y fiebre, de entre dos horas y media y tres (…) Es difícil para ellos mantenerse de pie durante dos horas”, lamentó Deodari.
Con información de EFE